domingo, 28 de marzo de 2010

¿Qué es...

Alguna vez se han preguntado que es lo que te están queriendo decir cuando la persona frente a nosotros dice las palabras "Te amo"?

Más de uno las habrá oido y otros muchos las habrán pronunciado, pero en verdad, ¿Cuál es su significado, qué es lo que implican? ¿Es sólo una frase subjetiva, que cada quien le da el valor que quiere? ¿O en realidad tiene un valor intrínseco que nadie ha tomado en cuenta?

"Te amo" gramaticalmente hablando, quiere decir que el hablante posee amor por el oyente. Entonces, ya que se sabe que poseer se refiere al hecho de tener algo propio, la única palabra que puede crear cierta confusión, sería "amor".

Así que la pregunta cambiaría a ¿Qué es el amor?.

¿Lo saben? La Real Academia Española nos dice las siguientes acepciones de la palabra amor:

1. m. Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser.

2. m. Sentimiento hacia otra persona que naturalmente nos atrae y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear.

3. m. Sentimiento de afecto, inclinación y entrega a alguien o algo.


Como podemos leer, las 3 primeras definiciones de la palabra concuerdan en una cosa: Encasillan al amor como un sentimiento.

Entonces, ¿es sólo eso? Un sentimiento, un producto de nuestras pasiones y deseos.

Quisiera creer que no, y no lo digo para echar tierra al equipo de trabajo de la RAE, lo digo porque si esta palabra tan usada es solamente eso, un sentimiento, tendría una fuerza tan grande como un viento. Podrá mover paja y madera, pero nunca moverá montañas.

Y bien, habrá aquellos que esto les parezca bien, para quienes el amor no tenga un significado o fuerza realmente significativo, pero yo no soy una de estas personas. Yo creo en el amor como algo que mueve montañas y mundos, algo que cambia las cosas, algo que va más haya de un vano sentimiento.

Para mí, el amor es firme, es voluntad, es decisión, coraje, fuerza, dolor, sacrificio, entrega.

Así que para hacerle competencia a la academia, decidí armar mi propia definición de amor, una más filosófica, más subjetiva tal vez, pero al mismo tiempo, mas concreta.

Amor, es una decisión firme, es una entrega total, donde uno toma su ser y decide sacrificarlo para estar a lado de otro ser y poder hacerlo feliz, sin importar los defectos o las virtudes, sin importar el tiempo o el espacio, haciendo que cada segundo que pase sea un segundo donde el amado crezca y madure, donde sus virtudes crezcan y sus defectos se vuelvan benignos.

Esto es lo que para mí es el amor, no un sentimiento, sino una decisión. Uno no ama porque se sienta atraído por alguien o porque a su lado se sienta comprendido, sino porque decide hacerlo.

Claro.. siempre habrá amores más o menos saludables; Aquellos amores donde el que ama da todo, y el amado no da nada. Sencillamente esto es, porque el amado no ama realmente, no ha decidido hacerlo.

Pero como dije, amar es una decisión, no ceguera como otros dicen.

Y bien, es esto lo que tenía ganas de decir.

Por cierto, el blog recientemente acaba de llegar a las 2000 visitas, gracias a todos los que siguen dando vueltas por él.

viernes, 26 de marzo de 2010

Hoy quise ser papá

Es curioso como lo que uno escucha en la radio, dicho por un par de actores y una actriz, puede hacerte sentir como una horda de sentimientos te golpea, muy curioso.

Últimamente escucho todas las mañanas el programa de "Ya párate" en los 40 Principales (90.7fm), conducido por Facundo, Omar Chaparro, Tamara Vargas y "La Garra". Es una transmisión divertida, que los conductores y sus tonterías hacen muy amena.

También me ha servido escucharlo para estar más al tanto de la música que la gente escucha hoy en día, lo cual es para mí algo nuevo.

Pero como todas las cosas buenas, tiene sus momentos duros. Me pasa que de pronto las canciones que escogen para que escuchemos me traen recuerdos difíciles de llevar, o simplemente me evocan sueños que al volver a la realidad me hacen sentir una poca de desesperación.

Mas el día de hoy fue diferente. Sólo se encontraban el primer y el último conductor que mencioné (Facundo y "la Garra") y platicaban de sus tonterías, hasta que uno de ellos decidió hablarle a Tamara y felicitarla por el hecho de que estaba embarazada.

Cuando escuché la voz de la mujer, radiante de felicidad por poseer en su interior una nueva vida en desarrollo, mientras contaba como le había dicho a su esposo, lo feliz que estaba y el gusto que le daba poder tener un hijo, no me pude contener.

Estaba manejando hacia la escuela de mi hermano, para dejarlo a él y a un vecino en ella. La respiración se me detuvo unos instantes y mis ojos se humedecieron. Me imaginé a alguien muy especial con su panzita ligeramente abultada mientras un doctor le hacía un ultrasonido y veíamos a nuestra pequeña bebé formándose en su ser. Sus ojos estaban radiantes, me miraba sonriente, tomaba mi mano y me decía que no fuera marica y dejara de llorar. Me temblaban las manos, me temblaba todo, sólo quería abrazarla y decirle que la amaba, darle las gracias por hacerme papá, por hacernos papás. Quería dejar de llorar pero no podía, las lágrimas salían sin ayuda, pero eran gotas de alegría derramada. Me acercaba a su vientre para darle un pequeño beso y volvía a verla devolviéndole la sonrisa, apretando su mano, haciéndole ver que siempre estaría para ella.

Se que soy joven para ser padre, pero algo dentro de mí me hace quererlo, no hoy, no mañana... pero quiero que pase.

Ya que dejé a mi hermano y a su amigo, lloré un poco más de camino a la uni; la imagen de nuestros rostros felices, y húmedo en mi caso, se quedó grabada en mi mente.

Cuidense.

martes, 9 de marzo de 2010

Lucian's style rice II

Después de algunos meses, casi el año, sin comentarles nada de mi conocida comida gourmet, aquí me tienen para llenar sus sentidos e imaginación de nuevas sensaciones.

Si alguien no lo sabía o no lo había notado, me encanta el arroz; para mí es la comida base más perfecta que puede existir. Va con todo, es versátil, puede ser postre, entremés o plato fuerte o las 3 cosas a la vez. Se usa de alguna manera en casi todas las culturas culinarias y es genial.

Fue por eso que cuando acompañé a mi madre a que comprara el mandado en la Costco y encontré un libro verdoso de pastas suaves y acolchadas con el título de "Arroz" no pude hacer otra cosa más que tomarlo entre mis manos y hojearlo. Era un recetario, de 100 recetas, todas a base del ingrediente mencionado. Mis ojos no lo podían creer. Además para mi suerte, el precio no era nada prohibitivo (90 pesos) por lo que se lo pedí a mi madre.

Eso pasó el sábado, pero no fue sino hasta el día de ayer que pude poner en práctica mis cualidades culinarias en la creación de alguno de los vistosos platillos de mi nuevo libro. El escogido tenía por nombre "Risotto de espinaca y jamón", algo sencillo para comenzar.

Aunque recién habiéndome decidido por esta receta, me encontré con algunas trabas.
  • No tenía espinacas
  • No tenía jamón
  • No tenía muchos más ingredientes que parecían casi necesarios
Por breves segundos mi falta de víveres casi me desmotiva, pero ante la necesidad, la imaginación y la improvisación siempre son buenas aliadas.

Decidí cambiar las espinacas por trozos de lechuga y el jamón por bologna.

Y ya teniendo esto comencé:

  1. Primero fundí dos cucharadas de mantequilla y una de aceite de olvida en una olla.
  2. Después puse a freír trozos de medio ajo que previamente había picado finamente (en la receta original era una cebolla completa, pero en el refrigerador no había mas que sólo una cebolla, y pensando en que mi madre pudiera necesitarla, decidí cambiarlo por medio ajo, ya que me gustan los sabores fuertes)
  3. Ya listo el ajo y la mantequilla vertí sobre ellos una taza de arroz y la removí hasta dejar todo bien impregnado de la mantequilla y el ajo, dejando el arroz a que también se friera un poco.
  4. Mientras hacía todo esto, calenté 1 litro de agua y ya estando en ebullición agregué dos cucharadas de consomé de pollo, bajando a fuego lento para que se mantuviera caliente.
  5. Ya que el arroz estuvo un poco transparente le fui poniendo cucharón a cucharón el consomé de pollo, removiendo antes de poner el siguiente cucharón hasta que el agua se absorbiera.
  6. Dejando consomé suficiente para un cucharón, dejé el arroz en ebullición mientras que hice trozos pequeños con la lechuga y corté la bologna en tiras finas.
  7. Ya que el arroz absorbió la mayor parte del agua y estaba cremoso, añadí el último cucharón junto con la bologna y lechuga en la olla y dejé que el agua se volviera a consumir.
  8. Retiré la olla del fuego y agregué otra cucharada de mantequilla, un poco de aderezo con limón y queso parmesano, se mezcló todo uniformemente y se sirvió.
Se que algunos dudarán de que tan bueno estaba el platillo, pero la verdad es que quedé maravillado... jamás había hecho algo tan rico. Ni siquiera el arroz que mencioné antes en este mismo blog se puede comparar... Esto era diferente... era... delicioso al extremo.

Me comí aproximadamente 3/4 del resultado, que se suponía era para 4 personas. (algo tuvo que ver que tenía mucha hambre, pero no aminora la verdad, estaba buenísimo).

El cuarto restante se lo comió mi familia, que también les pareció bueno, sólo que "muy condimentado para su gusto"... aunque no dejaban de comerlo.

Creo que el recetario comenzó con el pie derecho, de aquí a experimentar más cosas y tal vez algún día hacer esa receta como debía haberse hecho.

Nos vemos.

PD: Si alguien quiere que le haga arroz, deme los ingredientes necesarios, invíteme a su casa y veremos.
PD2: Esta es una foto del arroz:



domingo, 7 de marzo de 2010

...

Hola a todos... odio los domingos. Creo que nunca lo había mencionado antes en el blog, pero es verdad, sufro de un odio hacia el primer día de la semana. (si alguien quiere debatirme que el domingo no es el primer día de la semana, agarre un calendario y lea cual es la primera letra que aparece leyéndolo de izquierda a derecha.) No se que tiene, pero el aire que se respira los domingos me pone un poco de malas.

Supongo que en parte es el sentimiento de saber que al día siguiente comienza de nuevo la carga escolar o laboral (o ambas), que las presiones que pudiste poner en pausa el viernes, volverán a caer en tu espalda como losas en cuanto suene el despertador del lunes.

También tiene algo que ver que (por lo menos para mí) los domingos sean días que es casi imposible salir o ver a los amigos o hacer algo ligeramente divertido, son días tediosos por naturaleza. Mis padres me quieren en casa porque, en sus palabras: a) es un día familiar b) mañana tienes clases c) ya saliste toda la semana d) es el único día que puedes pasar con nosotros.

De estas razones, la primera no veo porque el domingo deba ser más familiar que los otros días, y si la razón "b" fuese válida, pues tampoco podría hacer nada más que los viernes y sábados; la razón c es una vil mentira en el 90% de las semanas y la d es una exageración, paso todas las noches de 12 a 5 con ellos en su casa.

Otra razón para que no me gusten los domingos es el exceso de tiempo ocioso. No me gusta no tener nada que hacer más que estar sentado viendo TV o en el MSN o viendo videos o escuchando música. Claro que estar realizando estas actividades es mejor que estar haciendo tareas domésticas o escolares, pero el no tener mi mente ocupada, usualmente hace que me ponga a pensar en mis problemas, lo cual me deprime, así que usualmente estoy deprimido los domingos.

Como extra, pues si, los domingos son los días que más tiempo paso "en familia" y es cuando más roces suceden entre los miembros de la misma. Si no es que mi hermano no se apura para bañarse e ir a misa, es que mi papá no hizo bien las cuentas y hace falta dinero, o es que yo no sirvo para ayudar en nada o es que sólo nos ponemos a ver televisión en ves de ayudar en casa, o... (la lista es larga). Los domingos usualmente son el día para hablar de todos los problemas de la semana, de desquitar los rencores e insultar de manera sutil.

Pero bueno, ya en 7 minutos terminará el domingo.

Por otro lado, esta semana comencé mis clases de vocalización, y me han gustado bastante. El profesor es muy amigable y los ejercicios sólo son ligeramente avergonzantes. Por el momento aun no cantamos en forma, pero ya nos pidió que hiciéramos una pequeña muestra para él con alguna canción que nos supiéramos. En mi caso fue la de La rosa de los vientos de Mägo de Oz, cantada sin pista porque el profesor no tiene pistas de ese grupo (una lástima). Con base en lo que escuchó, me recomendó que cantara algo como la canción de Un mundo Ideal (A whole new world) de la película de Aladdin, porque a su parecer mi voz encajaba. Junto con esa escogí otra del mismo cantante (Ricardo Montaner) que se llama Déjame Llorar. Y pues por el momento estoy trabajando con esas tres.

2 minutos más.

Este domingo además de depresión me trajo desilusión, ya que esperaba escuchar a los alumnos avanzados de vocalización presentándose en el Vicente Guerrero por el día de la Familia, pero debido a las lluvias, el evento se canceló.

Amo la lluvia y todo, pero en Mexicali, el que llueva usualmente es una calamidad, se tapan las coladeras, se inunda las calles, se ensucian los carros, se atora el agua en el piso de la parte de atrás de la casa... cosas así.

Y bien el domingo ha terminado, demos un gran aplauso para recibir al lunes que se proyecta aburridísimo y tedioso.

Nos vemos.

Por cierto, antes de irme, compré un recetario con 100 recetas cuyo ingrediente principal es el arroz. Estén preparados para otra receta mágica como la de hace algunos meses.

jueves, 4 de marzo de 2010

Ahora algo mio

La Voz

Diálogos del Hombre, su Ira y Soledad.

(Una obra para un solo actor, que interpretará a tres personajes, el Hombre, un ser perturbado, con voz masculina y grave con un toque de nostalgia; la Ira, proveniente del mismo hombre, tiene una voz más rasposa y aguda, dejando claro un gran desprecio al escucharse; y por último la Soledad, una voz más serena, pero aun más triste que la del Hombre, más femenina y pasiva.)

Un pequeño cuarto oscuro tiene dentro a un hombre sentado sobre un sillón. Pareciera que está dormido, pero se mueve un poco, colocando una de sus manos convertida en puño sobre su sien, dejando que su cabeza pose sobre ella. Respira profundo, como si le costara o más bien no quisiera hacerlo.

Hombre: Esta es una noche tan oscura, pareciera que las estrellas no quieren… a quien engaño, las estrellas brillan igual que todas las noches, la luna está ahí como siempre. Soy yo quien no ilumina… Me siento solo, tan solo.

Ira: ¿Y por qué será? ¡Pues porque lo estás! Y no solamente solo, también abandonado, nadie está contigo, nadie quiere estarlo, te han dejado.

Hombre: ¿Pero por qué lo han hecho? No es lo que quiero.

Ira: De que hablas idiota, no te engañes a ti mismo, si eres tú quien los ha obligado. Tú decidiste estar solo.

Hombre: Quería que ellos me buscaran… quería sentirme apreciado

Soledad: Pero sólo lograste que nos quedáramos sin nadie.

Hombre: ¿Y tú quien eres? Nunca te habíamos escuchado.

Soledad: Soy tu soledad.

Ira: Una más que se une al círculo de los enajenados, malditos seres sin sentido y sin dueño que vagan en este triste cuerpo.

Hombre: Que más da, una menos, una más, estamos solos y lo sabemos y las cosas no cambiarán.

Ira: Porque eres un imbécil… no tenemos nada que ofrecer, ni lo tendremos, no eres nadie, no somos nadie.

Hombre: Lo sé… siempre lo hemos sabido… pero la voz muda de nuestra locura me alentó a seguir y pensar que la vida era buena, que podíamos estar en ella y al final ser felices.

Soledad: Por segundos tan largos yo, tu soledad, pensé con júbilo que ya no existiría.

Ira: Mas, no fue así, no fuimos merecedores de nada, ni bondad, ni placer eterno.

Hombre: ¿Dónde está la otra voz? ¿La voz de nuestra esperanza?

Ira: Esperanza ha muerto o si muerta no está, está tan débil que hablar ya no puede. Pero, no te preocupes, yo, tu Ira, y ella, tu Soledad, siempre estaremos contigo.

Hombre: Me siento tan desolado, vacío… sencillamente solo.


Luciano Meléndrez


Esta escena la escribí hace aproximadamente una semana y fue presentada hace una hora para mi taller de teatro. Creo que quedó bien expuesta, faltará conocer la opinión de la profesora la próxima clase.

Por si a alguien le interesa escuchar el audio grabado de la escena, deje un comentario pidiéndolo o mándeme un correo y con gusto se lo envío.

Buenas noches

Un poco de algo no mío...

Volverán las oscuras golondrinas

Volverán las oscuras golondrinas
en tu balcón sus nidos a colgar,
y, otra vez, con el ala a sus cristales
jugando llamarán;
pero aquéllas que el vuelo refrenaban
tu hermosura y mi dicha al contemplar,
aquéllas que aprendieron nuestros nombres...
ésas... ¡no volverán!

Volverán las tupidas madreselvas
de tu jardín las tapias a escalar,
y otra vez a la tarde, aun más hermosas,
sus flores se abrirán;
pero aquéllas, cuajadas de rocío,
cuyas gotas mirábamos temblar
y caer, como lágrimas del día...
ésas... ¡no volverán!

Volverán del amor en tus oídos
las palabras ardientes a sonar;
tu corazón, de su profundo sueño
tal vez despertará;
pero mudo y absorto y de rodillas,
como se adora a Dios ante su altar,
como yo te he querido..., desengáñate:
¡así no te querrán!

Becquer

Un poema interesante... casi no he leído a Becquer, pero me pareció bastante bueno; más noche subiré una pequeña escena que escribí para mi clase de teatro, la cual será interpretada por mí el día de hoy. Espero salga bien.

Cuídense personas que habitan estos rumbos.